Este documental nos adentra en el mundo de quienes, al revés que la mayoría de la juventud actual, habiéndose criado muchas veces en grandes ciudades, deciden por propia elección volver al campo, vivir en un medio rural en el cual tener más contacto con la naturaleza, y con la vida que llevaban nuestros antepasados; retomar el gusto por las cosas pequeñas, aprender a producir y no siempre comprar, enfrentar los retos culturales y ambientales aún a falta de medios, en fin, volver a la tierra de la que a veces parecemos tan alejados.

Carmen Comadrán nos guía en este laberinto de caminos, a través de los propios protagonistas, quienes nos van contando sus experiencias. Una protesta contra el conformismo de tanta gente que por seguir al rebaño, no se anima a romper con sus rutinas, y a buscar un camino diferente.

Momentos de alegrías, de tristezas, la vida en comunidad, el aislamiento. Un interesante documental para asomarnos a ver otras formas de vida, y por qué no, a buscar el propio camino.